04 mayo 2020

Retos y reflexiones para los despachos pequeños y medianos ante la crisis Covid-19

Jose Luis Perez BenitezPor José Luis Pérez Benítez
TWITTER @jlpbenitez

Algunas recomendaciones para la gestión del despacho

Son muchas las guías y recomendaciones que se están realizando sobre qué cambios pueden operar en la abogacía a medio o largo plazo como consecuencia de la crisis actual; también es complejo y ardoroso el debate sobre las medidas que han de tomarse para la reanudación de la actividad judicial y los cambios en esta materia.

En nuestra opinión, a día de hoy sigue siendo imprevisible cualquier atisbo de futuro tanto social como económico, pero sí hay situaciones que hoy ya se están observando y que se deben afrontar.[1]

Pretendemos en esta publicación tratar el corto plazo. Poner encima de la mesa los retos más actuales para la mayoría de los despachos en España, que son pequeños y medianos.

Retos y reflexiones sobre la gestión y dirección del despacho

Existirían varios puntos a tratar relacionados con la liquidez, la gestión de personal y la reducción de gastos.

Gestión de la liquidez

Parece claro que va a instalarse,como en otras crisis anteriores, una “batalla por la liquidez”. Esto genera una reflexión en dos planos.

Por un lado, desde el punto de vista interno o liquidez de la firma, parece que el mercado exigirá una bajada de precios generalizada, por lo que afectará directamente a la liquidez de las firmas. También existe más riesgo de impago de las facturas y desde luego se van a alargar los plazos para el cobro a los clientes.

La máxima será “Cash is King”, donde cualquier cobro, incluso parcial, es un triunfo. De igual modo las firmas pequeñas y medianas deben tener mucho cuidado con su financiación externa -venga o no avalada con ICOs-.

Desde el punto de vista externo, o de liquidez de clientes, se abren oportunidades de negocio, aunque -como hemos visto- obviamente es la iliquidez de los clientes la que genera las tensiones de tesorería de los abogados.

En este sentido, el asesoramiento ha de moverse desde la conocida “cadena de valor del cliente” hacia la “cadena de liquidez del cliente” es decir, asesorarle y prestarle ayuda en su cadena de liquidez. Será más crítico y útil el despacho que ayude a sus clientes a cobrar y financiarse que aquel que por ejemplo le ayudaba en su expansión del negocio.

De igual modo, van a existir nuevas oportunidades de negocio derivadas de esta crisis, pleitos relacionados con la fuerza mayor o incluso con las sanciones administrativas, por ejemplo. Por otro lado los clientes buscarán despachos más baratos y esto da una oportunidad a despachos pequeños y medianos que puedan ser más flexibles.

Personal

En materia de personal parece obvio que hay que reducir costes. Independientemente de aquellos que hayan decidido acudir a un ERTE por su especialidad procesal o de sector, el resto ha de reducir costes salariales, en especial -y aunque no sea puramente un coste- la retribución de los socios.

La última opción debe ser reducir el número de abogados y proceder a despidos. Un abogado es un activo muy valioso y muy caro de formar, y es su trabajo (no la tecnología que usa) y quién presta el asesoramiento al cliente lo que nos ayudará a salir de la crisis.

Probablemente sí hay que reducir la retribución de socios, después los bonus y otros variables, y en su caso reducir algo la jornada, pero no despedir (esto ha de ser la última opción). En caso de tener que prescindir de profesionales, quizás deba salir antes el Staff que los abogados.

Reducción de gastos

En el caso de reducción de gastos, debe reducirse todo gasto no relacionado directamente con la producción. Por ejemplo, se pueden reducir gastos destinados a marketing, ventas, comunicación e imagen, incluido reducir el alquiler, que el gasto en alquileres suntuosos es más una falsa señal de imagen y marca que un espacio necesario para la prestación de servicios. Quizá los clientes van a valorar más el servicio y el precio que la gran Sala con vistas.

En general puede reducirse, de momento, los gastos destinados a marketing y a venta de cliente nuevo; y las tareas de ventas y comerciales deberían centrarse en el “uno a uno” y en el uso de herramientas muy baratas y sencillas, que nos mantengan próximos a nuestros clientes (por ejemplo, Linkedin).

Teletrabajo y tecnología

Esta crisis ha evidenciado lo rápido y bien que el sector legal incorpora una tecnología en su día a día cuando realmente le resulta necesario. Los despachos han demostrado no ser tan “arcaicos” ni tener la indolencia tecnológica que a veces se les imputaba.

Existen tecnologías muy buenas, sencillas y baratas, y debe apostarse por ellas sin necesidad de grandes inversiones. Quizá sí pueda invertirse en mejores ordenadores portátiles e internet -caso de ser necesario-.

De igual modo, el teletrabajo (aunque esto realmente lo sea excepcional y extraño) aumentará en el futuro, pero tampoco será una gran revolución. Obviamente habrá algunas más jornadas en casa, y quizá se reduzca la presencialidad extrema, pero pronto se volverá a las reuniones y a las interacciones personales que, por otro lado, son imprescindibles para la abogacía y para la creación intelectual que el servicio profesional exige.

Respecto del trabajo a distancia, sí pueden señalarse algunas “pinceladas”: el socio (jefe) debe estar muy próximo a sus empleados, ser muy cercano, incluso más en lo personal que en lo profesional. Preocuparse de verdad por la persona, pues hay muchas personas que lo están pasando muy mal.

Igualmente debe centrarse en ajustar tareas, más que horarios o cumplimiento de jornada. La clave del tele-trabajo es adjudicar tareas y chequear su cumplimiento, otorgando la libertad necesaria.

Se requiere libertad y confianza, es el momento de otorgarlas[2].

En resumen, y respecto del teletrabajo y la tecnología: Evolución Sí, Revolución No.

José Luis Pérez Benítez
Socio de BlackSwan
Web: https://blackswanconsultoria.com/
TWITTER: @jlpbenitez

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[1] Ver Informe McKinsey aquí https://www.mckinsey.com/business-functions/risk/our-insights/covid-19-implications-for-business

 

[2] Ideas incorporadas desde el trabajo de Investigación de la profesora Mireia de las Heras, IESE, Universidad de Navarra. Publicaciones 2020.

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