03 diciembre 2020

Liderar en libertad nuestro trabajo ON-OFF #forlawyers

Cristina Ruiz Por Cristina Ruiz

RESUMEN · La externalidad positiva del teletrabajo nos permite evolucionar hacia una nueva cultura del trabajo en la que trabajo presencial y trabajo en remoto actúan en equilibrio con el sustento de la confiabilidad y la responsabilidad, y bajo el motor de activación del sentido del propósito de liderarnos en libertad. Encontrar nuestro Ikigai es encontrar ese propósito por el que inspirar a los demás.

No es nueva la reivindicación de la flexibilidad laboral y el teletrabajo abogando por la conciliación, pero también por la productividad eficiente. Frente a ello se han plasmado argumentos de toda índole, tales como que se trataba de una reivindicación exclusivamente de género, o de hombres y mujeres pero solo de aquellos que pretendían trabajar menos al ser más difícil la supervisión efectiva de la dedicación y del trabajo.

Las actuales circunstancias conocidas sobrevienen y tanto la reivindicación como la contra-reivindicación se desvanece en el ambiente. La flexibilidad laboral a través del teletrabajo se hace absolutamente necesaria para el mantenimiento de la actividad empresarial y profesional, y se iguala para todos, hombres y mujeres. Decididamente no es una cuestión de género. Y el teletrabajo muestra por sí mismo que es productivo, y que trabajadores y profesionales somos comprometidos con nuestro trabajo y nuestras responsabilidades.

Ahora bien. El escenario en el que se ha producido el teletrabajo, no es “real”, fundamentalmente porque la precipitación de la situación nos ha “obligado” a trabajar, sí desde casa, pero en condiciones realmente adversas: en espacios inadecuados, con la familia requiriendo atención y con la tecnología “casera”.  A pesar de ello, el aprendizaje ha sido contundente: El teletrabajo es posible y todos hemos estado a la altura de las circunstancias.  El primer gran paso está dado. Vamos a por el segundo.

El segundo paso no puede comenzar lejos de la conciencia y el convencimiento de que, por naturaleza, somos sociales y necesitamos el contacto humano, y no solo por una cuestión relacional o emocional, que es fundamental, sino porque nuestra creatividad se desborda cuando estamos entre otros, entre nosotros. La creatividad nos lleva a crear y crecer, a estar en constante cuestionamiento y acción, a adoptar un permanente estado de motivación y positivismo. Además, la creatividad nos hace ser más productivos en todos los ámbitos.

En consecuencia, es palpable la necesidad de una # transformación Cultural en la manera de entender el trabajo. Un nuevo modelo de trabajo donde la # concectividad -presencialismo- y la # conexión -teletrabajo- convivan en # equilibrio, y cuyo fin sea la calidad de vida profesional y personal, de hombres y mujeres, de mujeres y hombres.

Este nuevo modelo de trabajo ha de actuar, por un lado, dotándose con voluntad de la tecnología necesaria para un teletrabajo efectivo y en seguridad, siendo esta un medio. Y, por otro lado, apostando por las personas, siendo estas un fin en sí mismas.

Hemos aprendido también en aquel acelerado, pero gran primer paso que nos ha tocado vivir, que tenemos una sorprendente # adaptabilidad y una, anteriormente impensable, extraordinaria # flexibilidad mental, que nos han permitido, nos permiten, y nos seguirán permitiendo la más acertada toma de decisiones en la # inmediatez. Nos merecemos un nuevo modelo de trabajo.

Toda transformación conlleva un proceso, somos conscientes, pero hemos adquirido una sólida madurez sustentada en dos pilares:

  • la # Confiabilidad, de los directivos en sus equipos y personas, y del cliente en su abogado. Y
  • la # Responsabilidad, de cada uno, en el convencimiento de ganar la confianza de nuestros directivos, y fundamentalmente, de haber ganado la de nuestros clientes.

Ahora bien, más allá de todo ello, lo que subyace como motor de esta transformación cultural del trabajo es un inexcusable # Sentido del Propósito, de definir una dirección y de realmente adquirir el #  Compromiso con nosotros mismos de conseguir las metas, con los esfuerzos y sacrificios que conlleve.

El Sentido del Propósito, el sentido del propósito tal y como lo veníamos concibiendo también ha cambiado. Esto significa que ahora debemos enfocarlo desde una perspectiva diferente. Antes buscábamos nuestro propósito en la realidad que nos rodeaba, ahora esta realidad “más que nunca antes” es imprevisible, y el futuro inmediato absolutamente incierto. No es posible dar sentido a nuestra realidad desde fuera. Pero esto no es ni bueno ni malo, todo lo contrario, esto nos va a permitir, “más que nunca antes”, adentrarnos en nuestro ser desde lo más profundo de nuestros valores y nuestras emociones, y desde ahí encontrar nuestro Propósito.

Adentrarnos en nuestro ser, nos permite #  Liderar en libertad nuestras propias vidas e inspirar a los demás ya que liderar no es sino influir positivamente en otros, desde la confiabilidad, el compromiso y la responsabilidad

Es de esta manera como un nuevo Sentido del Propósito y un nuevo Liderazgo en libertad confluyen en esta transformación cultural hacia un nuevo modelo de trabajo, el del equilibrio entre conectividad y conexión. Un nuevo modelo en valores: la confianza, la responsabilidad y el compromiso. Un nuevo modelo donde todos y cada uno somos líderes de nuestras vidas, donde cada día nuestra actuación proactiva y coherente nos introduce en nuestro propósito, inspirando a los demás.

Práctica l Liderar en libertad, encuentra tu Ikigai.

Trabajar en presencial o trabajar en remoto requiere un gran sentido de la responsabilidad, supone un fuerte compromiso, y conlleva una estricta disciplina. Nada de esto se nos hace ajeno a los abogados, tanto a los que desarrollan su labor profesional para una firma, como para los que trabajamos en despacho propio. Tampoco se nos hace extraño trabajar en los pasillos del juzgado, en el coche o un recóndito lugar, tratando de aprovechar el tiempo al máximo. Tampoco es infrecuente trabajar puntualmente desde casa en horarios fuera de los del despacho. Pero aún nos quedan algunos retos que superar en esta nueva cultura del trabajo: ¿seríamos capaces de “geolocalizarnos” con más frecuencia en casa para trabajar desde ahí? ¿seríamos capaces de abanderar el “derecho a la desconexión”?

Las claves para conseguirlo se pudieran presentan claras a la vista de todos:

  • Delimita tu espacio de trabajo, desde casa.
  • Determina el tiempo de trabajo, desde casa.
  • Define un plan de trabajo con objetivos claros y medibles, para casa.
  • Dótate de la tecnología necesaria, en casa.

Si embargo hay algo más, esa significación, esa  #  Motivación necesaria para trabajar desde el despacho, pero también desde casa. “Eso” que día a día te hace #  Sentirte Realizado profesional y personalmente, esto es, verdaderamente comprometido y responsable con la sociedad, con las personas y contigo mismo. “Ese”, tu #  Ikigai.

Ikigai como término está compuesto de dos palabras japonesas: iki (生き), se refiere a la vida, y kai (甲斐), se refiere a “la realización de lo que uno espera y desea”. Es una filosofía de vida japonesa Ikigai: los secretos de Japón para una vida larga y feliz · El método ikigai  de Héctor García y Francesc Miralles.

Todas las personas tenemos nuestro Ikigai, esto es, un sentido de la vida, de la razón de ser y de la realización personal y profesional. Todos tenemos nuestro Propósito. Pero el propósito de cada uno no es algo que inventamos, sino que tenemos que buscarlo, encontrarlo y ser conscientes de él. Ese “eso” que nos permite levantarnos ilusionados para seguir liderando nuestras vidas cada día.

El objetivo del método Ikigai es identificar:

  • aquello que te produce satisfacción realizar
  • aquello en lo que sabes que eres bueno
  • aquello que crees que puedes aportar el mundo
  • aquello que te permite desarrollarte profesionalmente

Este método busca el equilibrio entre nuestro pasado, presente y futuro por lo que se configura como un trayecto en tres etapas:

  • Viaje al futuro. Ejercicios para proyectar tu futuro activando todo tu potencial.
  • Viaje al pasado. Redescubrir nuestras pasiones en la niñez y la adolescencia nos permite acercarnos a nuestros ikigai.
  • Viaje por el presente. Nos dota de herramientas para ayudarnos a fluir en libertad.

Un viaje completo que pasa por 35 Ideas-Fuerzas que te permiten encontrar y poner en práctica tu Ikigai personal de presente.

Estos dos enlaces te permitirán profundizar un poco más en el método de búsqueda de tu ikigai. Las tres etapas del método Ikigai y El método Ikigai ejercicios prácticos.

Encontrar tu Ikigai supone haber encontrado tu propósito personal y profesional, pero conlleva estar en constante acción para mantenerlo presente. Así es, tu ikigai no es el mismo a lo largo de toda la vida, tus creencias y tus valores adquieren una prioridad distinta en unos momentos u otros, ahora bien, lo importante es que sea cual sea tu Ikigai, tienes que tener la capacidad de adaptarte a sus cambios de tal menara que continúe proporcionándote la motivación necesaria para mantener tu autoestima muy alta liderando tu propia vida, sintiéndote comprometido y responsable con la sociedad, con las personas y contigo mismo.

Ikigai es ese propósito por el que inspirar a los demás.

Cristina M. Ruiz Pérez

Consultora en Creatividad Innovadora #forlawyers

Abogado · Socia Abogados Especialistas Asociados

*Este artículo previamente ha sido publicado en la Revista Jurídica “Testigo de Cargo” del Ilustre Colegio de Abogados de Granada

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