16 diciembre 2014

Experiencia de una abogada en las Jornadas de Internacionalización de Moscú

Letrados de toda España de la mano del ICEX y del CGAE en las jornadas de internacionalización celebradas los días 28, 29 y 30 de Noviembre en la capital rusa.

Desde mi experiencia profesional como abogada de una nueva generación de letrados, los servicios jurídicos del siglo XXI distan cada día más de la abogacía tradicional vinculada a los clientes  de barrio, a las carteras heredadas, así como a los bancos o compañías de seguros, que mercadean cada día más los honorarios con estrangulación de minutas afectas por estrictas políticas de reducción de costes. Igualmente, es cada día más difícil la supervivencia profesional de la Abogacía ejercida tan dignamente por el letrado del turno de oficio continuamente pisoteada y vejada por los continuos recortes e impagos de las instancias públicas.

La globalización, las tendencias del mercado, los cambios de usos sociales, la internacionalización, las  tecnologías, y las nuevas necesidades de los clientes, obligan a una letrada de mi generación, que reside en un bonito rincón de España, como Orihuela (Alicante), bañado por una costa en la que conviven y convergen en múltiples nacionalidades e intereses económicos, socia de un despacho pequeño, Navarro & Hernández Abogados, a innovar en la profesión, a tener un perfil más comercial además del puramente técnico, a marcar una estrategia para la captación de clientes, a estar presente en las redes sociales, a utilizar las tecnologías, y a salir a vender nuestros servicios jurídicos al extranjero como vienen haciendo nuestros colegas americanos o anglosajones desde hace años.

El CGAE y el ICEX  vienen contribuyendo con gran acierto a la adaptación a dichos cambios de paradigma mediante las jornadas de internacionalización de la abogacía de las que he formado parte el pasado Noviembre en Moscú, constituyendo una experiencia personal apasionante además de muy enriquecedora a nivel profesional.

Una veintena de letrados de distintas zonas de España dejamos nuestros despachos, nuestros quehaceres y nuestras agendas de señalamientos, para asomarnos al mundo y ver cómo piensan nuestros colegas rusos, como trabajan y como se venden, a fin de aprender, poner en común, comparar, tomar referencias de sus sistemas de trabajo, de sus procesos de gestión, siendo una comparativa esencial para la auto evaluación y el análisis de lo que somos, de lo que hacemos y lo que ofrecemos, y así adaptarnos a los nuevos tiempos, y reinventarnos en un mercado globalizado y cada vez más competitivo.

La aproximación y presencia física en la Federación Rusa, o en cualquier otro país con el que nos relacionemos, genera la posibilidad de crear lazos profesionales, y por tanto nuevas oportunidades, asociadas a la internacionalización de nuestros servicios a través de estructuras de colaboración con firmas extranjeras, con la constitución de alianzas, asociaciones, delegaciones u oficinas de representación, siendo que gracias a las nuevas tecnologías como puede ser la videoconferencia, no existirán distancias con nuestros socios del otro lado del mundo ni con nuestros clientes internacionales.

Del mismo modo, el acercamiento a la cultura, a las formas de vida, a sus tradiciones e intereses, aportan mucho valor añadido, además del placer de disfrutar de la arquitectura tan característica, desde la colorista y majestuosa catedral de San Basilio que preside la Plaza Roja, junto al Kremlin levantado a la orilla del Moscova, pasando por las imponentes estaciones de metro o por las calles más comerciales entre los tan emblemáticos rascacielos bautizados como las siete hermanas de Lenin.

A más, estas experiencias brindan la oportunidad de aprender mucho de mis compañeros de viaje desplazados desde todos los rincones de España, desde las Islas Canarias y Baleares hasta Galicia, pasando por Madrid, Zaragoza, además de los procedentes de la Costa Andaluza y Levantina como es mi caso. De todos ellos, he aprendido mucho, de sus intereses e inquietudes, aspiraciones, de sus presentaciones, entre los que he creado lazos que generan mucha proximidad entre las distintas tierras de España.

A mi parecer, desde todas las instancias de la Abogacía Institucional, a la que además, represento desde el Colegio de Abogados de Orihuela, en calidad de Tesorera, tenemos el deber de prepararnos para los tiempos de hoy, apostando por una adecuada formación que se adapte a los nuevos paradigmas de la profesión, con intercambios jurídicos internacionales que nos permitan en el análisis y la comparación del ejercicio de la profesión desde distintos prismas, así como la exploración de otras áreas de conocimiento y de nuevas  oportunidades de trabajo vinculadas a la inexistencia de fronteras, como podrían ser el contrato electrónico, los contratos internacionales,  los procesos judiciales trasfronterizos, la circulación trasnacional de capitales o el arbitraje internacional, para lo que sin duda es imprescindible la herramienta del idioma, con el conocimiento técnico de al menos, la lengua inglesa, en su ámbito jurídico y comercial, al que desde nuestro colegio se presta especial interés con compromiso y dedicación.

Mi más sincero agradecimiento, al Consejo General de la Abogacía Española y como no al ICEX  y a todo su personal, por esta iniciativa que tanto nos aporta sobre todo a las nuevas generaciones de letrados de los pueblos y provincias de España que se encuentran lejos de los grandes despachos, pero con  ideas innovadoras e iniciativas propias de la Abogacía del siglo XXI, desde aquí, todo mi apoyo para fomento, participación, difusión entre sus 83 colegios y todos los colegiados que los integran.

 

Mariola Hernández Ruiz.

Abogada ICA Orihuela

Socia Navarro & Hernandez Abogados

Asociada Red Internacional Despachos Asociados

Tesorera ICA Orihuela

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