La Fundación ONCE lanza ‘No te rindas nunca’ para facilitar el empleo a jóvenes con discapacidad
El vídeo de la campaña ‘No te Rindas Nunca’, lanzado por Fundación ONCE el lunes 28 de enero, ha conseguido convertirse en viral gracias a las redes sociales. Durante los últimos días, se ha colocado entre los contenidos más destacados de YouTube en España, lo que ha potenciado su viralidad. Además, una de cada cuatro personas que lo han visto en Facebook lo ha compartido en esta red social.
El interés que ha despertado ‘No te Rindas Nunca’ http://youtu.be/qyehfClKCVc es fruto del mensaje de ánimo que transmite a través de los testimonios de un grupo de jóvenes con discapacidad. Un mensaje de estímulo en un momento de crisis con el que toda la sociedad se siente identificada.
Estos jóvenes con discapacidad se dirigen en primera persona a otros como ellos y les animan a perseguir sus sueños, a no rendirse, a no colgar los guantes y a luchar por lo que quieren, demostrando que pueden y que son capaces.
Este vídeo líder de audiencia es la imagen del Plan ‘No te Rindas Nunca’ (NTRN), un programa flexible que pretende impulsar el empleo de los jóvenes con discapacidad menores de 30 años, un grupo social que soporta una tasa de actividad cuarenta puntos por debajo de la del resto de los jóvenes españoles.
El proyecto, desarrollado por FSC Inserta, la entidad de la Fundación ONCE especializada en formación y empleo de personas con discapacidad, consta de una batería de 34 medidas concretas que abarcan todos los aspectos fundamentales para promover el empleo en este segmento de población. Unas medidas que van desde la formación personalizada y la promoción del emprendimiento, hasta la intermediación laboral con las empresas que integran la discapacidad en sus políticas de Responsabilidad Social Empresarial.
Objetivos, motivación y compromiso
El plan se plantea para el trienio 2013-2015 y pretende llegar a más de 9.000 jóvenes con discapacidad, de los que 6.000 recibirán formación para acceder al mercado laboral en las mejores condiciones. El objetivo es que no menos de 3.000 de ellos logren un contrato laboral.
Para conseguir esas metas, es fundamental, por un lado, incrementar la tasa de actividad de los jóvenes con discapacidad y estimular en ellos la búsqueda activa de empleo, y por otro, lograr el máximo compromiso posible de los empresarios y empleadores, para que valoren el talento y la capacidad que aportan estos jóvenes además de los beneficios económicos y las ventajas fiscales que comporta su contratación.
Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondientes al año 2011, en España había al menos 76.000 jóvenes menores de 25 años con algún tipo de discapacidad de los que apenas un 35% estaban activos. Dentro de ese grupo social, solo el 14,5% tenía un empleo remunerado y su tasa de paro era del 58, 5%.