01 octubre 2012
Condenado a 20 años de cárcel un activista pro DDHH en Camboya
Un tribunal camboyano ha condenado a 20 años de cárcel al director de una emisora de radio y defensor de los derechos de las tierras, Mam Sonando, de 71 años, tras declararle culpable de encabezar una rebelión contra el Estado, según informa Europa Press.
Tres magistrados del tribunal de Phnom Penh han condenado a Sonando, que cuenta también con nacionalidad francesa, y a otras trece personas por incitar a los habitantes de la provincia de Kratie, en el este, a rebelarse contra el Gobierno.
Sonando, un veterano defensor de los Derechos Humanos y crítico con el primer ministro Hun Sen, ha sido acusado de incitar a los habitantes a tomar las armas e intentar reclutar a hasta un millón de personas para derrocar al Gobierno.
En un discurso televisado el pasado mes de junio, Hun Sen instó a que Sonando fuera detenido por orquestar “un complot para derrocar al Gobierno e intentar establecer un estado dentro del estado”. El activista, que dirige la emisora de radio Beehive Radio, se había declarado no culpable.
El número de disputas por tierras en Camboya ha aumentado considerablemente en los últimos años a medida que crece la economía y las empresas tratan de explotar recursos naturales como el caucho, el azúcar y los minerales.
Los grupos de Derechos Humanos han acusado al Gobierno autoritario de Hun Sen de aplastar los derechos de la tierra otorgando grandes concesiones de terrenos a las compañías y obligando luego a sus moradores a abandonarlas a la fuerza.
Los partidarios de Sonando defienden que éste es perseguido por criticar al Gobierno. El hombre ha hecho el signo de la victoria con su mano cuando era trasladado esposado de vuelta a prisión tras ser condenado, asegurando que está “orgulloso”.
Según el presidente del Centro Camboyano para los Derechos Humanos, Ou Virak, el tribunal no presentó ninguna prueba que sustente el veredicto de culpabilidad. “Estoy muy decepcionado de que después de muchas décadas nuestro tribunal no sea una institución respetable en la que encontrar justicia para el pueblo”, ha lamentado, denunciando que “el veredicto fue escrito por los políticos”.
El tribunal condenó a otros dos imputados a 30 y 15 años de prisión en ausencia. “El veredicto solo sirve para demostrar, una vez más, que los tribunales en Camboya son usados cada vez más como herramienta para la represión”, ha denunciado en un comunicado la Federación Internacional para los Derechos Humanos.