El Consejo establece sus prioridades para el presupuesto de la UE para 2018

El 21 de febrero de 2017, el Consejo ha establecido una línea continuista en materia presupuestaria para el año 2018. Esto significa que se seguirá apoyando la recuperación de la economía europea, se continuará haciendo frente a los desafíos humanitarios y de seguridad tanto dentro como fuera de las fronteras de la UE. El Consejo recuerda el principio de solidaridad como un pilar fundamental de la Unión.

Líneas concretas:

• Requiere documentos presupuestarios amplios:

El Consejo anima a la Comisión a mejorar continuamente el contenido de sus documentos presupuestarios a fin de simplificarlos y concursarlos, justificando claramente los créditos solicitados.

A su vez, reconoce la utilidad del sistema de supervisión activa y previsión de la ejecución presupuestaria de la Comisión, con el fin, entre otras cosas, de evitar la posible acumulación de un retraso excesivo

• Una mayor cooperación interinstitucional durante el procedimiento presupuestario:

El Consejo pide a la Comisión que garantice la presentación del estado de previsiones para 2018, lo que permitirá a cada institución disponer de tiempo suficiente para llevar a cabo un análisis técnico detallado de las estimaciones diseminadas y preparar a fondo su posición de acuerdo con un calendario pragmático acordado.

• Una mayor información sobre los gastos administrativos:

El Consejo pide a todas las instituciones y órganos de la UE que proporcionen a la Comisión información oportuna, completa y consolidada sobre sus gastos administrativos. De conformidad con el Reglamento financiero, la Comisión adjuntará al proyecto de presupuesto los documentos que permitan al Parlamento Europeo y al Consejo evaluar la situación y adoptar decisiones fundadas sobre la asignación y utilización de los recursos.

• Un mayor control del presupuesto de las agencias descentralizadas:

El Consejo reconoce su importancia pero recuerda que en los próximos presupuestos debe mantenerse su financiación bajo un control estricto y limitarlas solo a necesidades sustanciadas.