12 noviembre 2013

No dejes que la pobreza imponga su ley. Tu compromiso cuenta

Este año, el Premio Derechos Humanos de la Abogacía Española ha recaído en dos instituciones cercanas y conocidas por la impagable labor que realizan con los más desfavorecidos de nuestra sociedad: Cáritas y Banco de Alimentos.  Desde el estallido de la crisis, han aumentado su campo de actuación al ocuparse de ciudadanos que  han pasado al negro territorio de la exclusión social, que han perdido su trabajo, su vivienda y que no pueden permitirse comer dos veces al día o atender las necesidades más elementales de sus hijos y las suyas propias.

Premiar es loable, pero no suficiente. También hay que arrimar el hombro, ayudar, comprometerse y movilizarse. Y la Abogacía ha sido siempre una profesión solidaria. Lo hemos demostrado creando servicios de orientación jurídica gratuita en los Colegios de Abogados y 39.000 abogados lo demuestran 24 horas al día, 365 días al año en el Turno de Oficio. Pero podemos hacer más. Por ello, el Consejo y los Colegios de Abogados, a través de la Fundación Abogacía Española, hemos puesto en marcha la campaña: Abogacía Solidaria. “No dejes que la pobreza imponga su ley”, una iniciativa destinada a fortalecer la solidaridad de los abogados y las instituciones colegiales con las personas que más sufren. Sus problemas los vemos cada día en nuestros despachos, en los juzgados, y en todos aquellos lugares en los que se nos necesita. Por esta razón, no solo nos comprometemos profesional y personalmente,  sino que también asumimos la responsabilidad social que tenemos como colectivo.


 

Nuestra profesión presta un servicio público esencial a la sociedad. Luchamos por la Justicia y los Derechos Humanos en la defensa de un Estado social y democrático de Derecho, tal y como establece el Título Preliminar de nuestra Carta Magna. Todos tenemos reconocidos, entre otros, el derecho a una vivienda digna, a un trabajo o a un salario suficiente, es decir, a un conjunto de derechos sociales y económicos que definen lo que se denomina Estado del Bienestar. Para los más de 3.000.000 de españoles que sobreviven con menos de 307 euros al mes esa realidad es solo una utopía.

Como dije respecto a las Tasas Judiciales, no puede haber ciudadanos de primera y de segunda categoría. Todos somos iguales. No podemos dejar que la pobreza imponga su ley y siga penetrando en más hogares de nuestro país. Necesitan ya nuestro compromiso.

Por esta razón, te pido que te unas a esta campaña Abogacía Solidaria con tu aportación e implicación. Muchos lo necesitan. La Abogacía no puede quedarse atrás mientras miles de personas se quedan en la estacada. Como dice el artículo 1 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos que este año cumple su 65 aniversario, “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros”. En esta batalla contra la pobreza y por la dignidad, todos y cada uno de los abogados de este país cuenta. Tú, también.

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