27 septiembre 2013

Abogados mediadores

Con la promulgación de la Ley 5/ 2012, de Mediación en Asuntos Civiles y Mercantiles, el legislador decidió regular una actividad profesional que los abogados llevamos mucho tiempo llevando a la práctica, pero que, por fin, quedaba enmarcada dentro del ámbito normativo español. Lo primero que los abogados aprendíamos y seguimos aprendiendo es a buscar el acuerdo, el consenso entre las partes. Redactamos escritos y hablamos con nuestros compañeros y clientes para intentar solucionar amistosamente el litigio. Siempre he mantenido que la mitad de los asuntos que llegan a un despacho no se judicializan, se solucionan gracias al trabajo, a la mediación, de los abogados. Otra vía es posible.

Ayer, asistí junto a Gonzalo Moliner, presidente del Consejo General del Poder Judicial y el ministro de Justicia, Alberto Ruíz-Gallardón, entre otras autoridades y expertos, al III Simposio de Tribunales y Mediación que se está celebrando en Madrid organizado por la asociación Grupo Europeo de Magistrados Pro Mediación en España (GEMME-España), el Consejo General de la Abogacía Española, el Colegio de Abogados de Madrid y el CGPJ, entre otras instituciones, bajo el título “Balance de un año de vigencia de la Ley 5/2012 de Mediación Civil y Mercantil”. Y con carácter previo, se celebró el día 25 de septiembre un presimposio en la sede de la Abogacía Española con el título de “Declaración de adhesión de las profesiones jurídicas a la mediación”.

Desde hace años, he expresado también la necesidad de una justicia más ágil, moderna y eficaz  que preste un mejor servicio al ciudadano en la defensa diaria de sus derechos. En este sentido, la mediación se convierte en un instrumento indispensable para poder ofrecer una alternativa extrajudicial a la resolución de conflictos.

La mediación acerca más a las partes al diálogo, al encuentro y a una solución satisfactoria más rápida, sin necesidad de congestionar los tribunales  con más asuntos. El Ministro de Justicia ha anunciado que en breve se pondrá en marcha el Reglamento de la Ley de Mediación, con la creación de un registro de todos los mediadores y las instituciones de mediación. Es una buena noticia. La Abogacía ha tenido, tiene y debe tener más aún en el futuro un papel privilegiado en la mediación. Es más, en 2011, desde el Consejo General de la Abogacía Española se puso en marcha la Comisión de Métodos Extrajudiciales para la Resolución Alternativa de Litigios y Conflictos para impulsar este servicio entre los letrados y los Colegios de Abogados y se está realizando una labor encomiable para difundir entre ciudadanos y profesionales las ventajas de la mediación. Con tres cursos de formación organizados dentro del Plan para la Formación Continua del Consejo General de la Abogacía Española -el pasado 18 de septiembre, comenzó el cuarto curso de especialista en mediación-, ya hay 534 abogados especializados al margen de los que también han formado en otros cursos muchos Colegios de Abogados. Y esto es solo el principio.

 

Jornada GEMME CARNICER GONZALO MOLINER GALLARDON0

 

 

La formación es esencial para nuestra profesión, como he expresado en múltiples ocasiones.  Es nuestro compromiso institucional y profesional día a día y, también, parte de nuestro futuro. Estoy seguro de que no hay profesionales mejor dotados para mediación que los abogados. Por esta razón, necesitamos  formar bien y transmitir confianza;  solo así,  la mediación será un auténtico éxito.

Por último, quiero saludar y desear los máximos logros a los ponentes que hoy siguen trabajando en la segunda jornada de este simposio para hacer de la mediación una herramienta indispensable en la búsqueda de la concordia y el acercamiento. Tiendo mi mano y la de la Abogacía ante este nuevo reto.

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